Francisco Marroquín, rector de la Universidad Politécnica de Pachuca (UPP), se reunió este jueves 11 de julio con al menos 80 miembros del Sindicato Único de Trabajadores de la institución para abordar las deficiencias en la infraestructura escolar, que no ha recibido mantenimiento en 12 años y que se ha visto afectada por las recientes lluvias.

Marroquín, quien lleva un año y cuatro meses en el cargo, reconoció las deficiencias expuestas por el personal docente durante el paro de labores del mismo día. Explicó que las goteras en algunas aulas han provocado encharcamientos y que un plafón se derrumbó debido a la humedad.

El rector explicó que en 2023 no se detectaron las fallas en los techos debido a la sequía y que solo recientemente se han hecho evidentes los desperfectos.

"Son gestiones que se tienen que hacer a través del estado... Tenemos que obedecer a las autoridades, no nos mandamos solos y tenemos que hacerlo con cada uno de los edificios", afirmó, sin precisar el costo total de las reparaciones. Indicó que las licitaciones se manejan con la Oficialía Mayor para montos a partir de 50 mil pesos.

Marroquín también mencionó que el plafón caído pertenece a un edificio inaugurado en marzo de 2024, el cual está cubierto por garantía, por lo que la reparación no tendrá costo para la universidad. Debido a estos problemas, las clases presenciales se suspendieron durante una semana y, tras evaluar las condiciones, se decidió continuar en modo virtual hasta el lunes 22 de julio.

"Hay que levantar los plafones, porque si se mojan se rompen y pueden caer a los estudiantes. Además, los edificios tienen conectores de energía eléctrica en el suelo que se inundan, pero así fueron diseñados", concluyó Marroquín.

Respecto a la exigencia de aumento salarial de los trabajadores, el rector señaló que el presupuesto es reducido y debe cubrir tanto las peticiones del sindicato como necesidades de cómputo, infraestructura, conectividad de fibra óptica y la planeación para un nuevo autobús.

La mañana del jueves 11 de julio, alrededor de 80 agremiados bloquearon la calle de acceso principal a la UPP para manifestar sus inconformidades y exigir una homologación salarial del 30% y la recategorización de puestos. Después de aproximadamente ocho horas, levantaron el paro laboral.