A partir de este viernes, millones de estudiantes de secundaria en China comenzarán los temidos "gaokao", exámenes cruciales para su ingreso a la universidad que marcarán su futuro académico y profesional. Este año, más de 13.4 millones de estudiantes se han registrado para participar, según el Ministerio de Educación, lo que podría establecer un récord histórico en el número de participantes.

La importancia de estos exámenes se refleja en las escenas frente a las salas de examen en Beijing, donde madres vestidas de carmesí y padres con paraguas acompañaban a sus hijos bajo la lluvia. Los "gaokao" evalúan a los estudiantes en varias asignaturas, incluyendo chino, inglés, matemáticas, ciencia y humanidades. Los resultados son determinantes para el acceso a la educación superior.

Con el rápido crecimiento económico de China, la educación superior también se ha expandido, al igual que las expectativas de los padres sobre las carreras profesionales de sus hijos. Sin embargo, el mercado laboral para los recién graduados no es tan prometedor como antes. La segunda economía mundial sigue luchando por recuperarse tras la pandemia, el desempleo juvenil alcanzó niveles récord antes de que las autoridades dejaran de publicar esta estadística.

Sun Song, un padre de 45 años, compartió sus pensamientos mientras esperaba junto a otros padres, después de llevar a su hija a su primer examen. "Estamos tratando de mantener las expectativas en perspectiva", comentó, reflejando la mezcla de esperanza y preocupación que sienten muchos padres en esta etapa crucial para sus hijos.

En este contexto de desafíos económicos y alta competencia, los "gaokao" siguen siendo una de las pruebas más significativas en la vida de los jóvenes chinos, determinando su acceso a oportunidades educativas y profesionales.